
Los seres humanos nos protejemos con máscaras de soberbia que impiden que mostremos nuestro verdadero ser
CDMX, 1/6/2011. Este día Ramavajan se cuestionaba: ¿cuál será la mejor manera de terminar con el imperio de las drogas, que daña a tanta gente? En un chispazo de genialidad, encontró la respuesta: Padre; ayúdanos a que las personas en este mundo dejen de disfrutar del consumo de los estupefacientes, que le pierdan el gusto a estos vicios y que, con tu rayo de Conciencia, pierdan el interés por consumir alcohol, cigarros o cualquier otro enervante. Sintiendo que su petición había sido escuchada, comprendió que viene la debacle del narcotráfico a nivel mundial, que tanto ha afectado a las personas.
A partir de esta fecha veremos cambios sorprendentes que resolverán, de manera simple y creativa, un problema que parecía no tener fin (tengamos una fe inquebrantable).