Los seres humanos nos protejemos con máscaras de soberbia que impiden que mostremos nuestro verdadero ser
¿Qué es el dinero?... –Dios
La divinidad no sabía (o fingió no saber) a qué nos referíamos cuando le pedimos de favor que nos mandara más dinero*
Fotografía de Sharover (efecto de Lunapic.com)
Preámbulo
CDMX, 10/3/2012. Cuando Ramavajan se conecta con Dios, es posible que establezca una comunicación con su Yo Superior (todos tenemos siete dimensiones que vibran en diferentes frecuencias, siendo la séptima la de nuestro espíritu o Ser Supremo). Nos dijeron que, al momento, Dios ha creado quinientas dimensiones, pero conectarnos con frecuencias más allá de la dimensión cien podría calcinar nuestro cuerpo físico (el de los mortales como yo; no tanto de Ramavajan, quien ha estado penetrando realidades más altas).
Preguntando a la divinidad
Al reunirnos para trabajar nuestro líder y yo (Sharover), nos encontrábamos preocupados por la situación económica que experimentábamos; nuestro líder preguntó a Dios (a quien él llama "El Jefe"): ¿cómo podemos obtener mayores cantidades de dinero? Pero casi de inmediato, le respondió: ¿qué es el dinero?* y nos cayó un balde de agua fría.
¿Es una broma?
Confundidos, desencantados, lo que la divinidad dijo nos impactó. ¿Cómo es que Dios no sabe qué es el dinero? (siendo que, para los de aquí abajo el dinero es nuestro dios; a menudo tenemos más fe en los capitales que en los arcángeles). Pues ¿dónde estás, Dios, que no te enteras de todo lo que estamos sufriendo aquí en esta dimensión? –pensamos. ¿Por qué no desciendes a nuestro mundo para que veas todas las carencias que padecemos? En ese momento surgieron muchas emociones basura en nuestro interior y se manifestaron nuestros egos (yo ni sabía qué decir). Nuestro líder entonces le refirió a Dios que el dinero es la herramienta de intercambio que utilizamos aquí en tercera dimensión para adquirir todas las cosas que necesitamos.
Una pausa que se hizo eterna
Seguíamos aturdidos por la respuesta; después de unos segundos -que parecieron siglos-, la divinidad aconsejó: para obtener más dinero sólo tienen que tener paciencia; ser felices; no se preocupen de nada; no se aferren a nada; fluyan en todo momento y recen mucho; de ese modo van a recibir mucho dinero.
Un Dios demasiado desapegado
Ya hemos escuchado que Dios es un ser desapegado –prefiere que crezcamos espiritualmente a pesar de estar adoloridos, llorando y gimiendo sin parar. Su consejo: no se preocupen de nada era demasiado obvio y, a la vez, extremadamente profundo. Ramavajan recordó: cuando era joven, me preocupaba muy poco de las cosas; no pensaba en nada, me divertía horrores y, la verdad, me iba muy bien económicamente. Hoy día estamos tratando de recuperar esa manera de ser que nos dio todo sin pedirlo. Tenemos que regresar a nuestros orígenes -comentó Ramavajan. Con las premuras de la vida cotidiana, estas bellas palabras se nos escapan y olvidamos vivir en paz y dejamos de lado la "fe inquebrantable" que nos recomendaron tener desde el inicio de nuestra misión.
La opinión de los Maestros
En otra ocasión -cuando estábamos igualmente desesperados-, suplicamos a nuestros Guías Espirituales nos dijeran qué está ocurriendo con la Opulencia Máxima, Divina y Perfecta que nos prometieron y que no hemos recibido aún. Ellos serenamente dijeron: primero necesitan terminar de limpiar todas las emociones basura que aún tienen y que están entorpeciendo su felicidad.
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* Nota: Es posible que ese ¿qué es el dinero? haya sido un llamado a la reflexión sobre qué es lo más importante aquí, en nuestra realidad.
** Percibí algo difícil de explicar, como si el Ser Supremo con quien estábamos platicando fuera de un nivel muy elevado; sentí que no se había conectado antes, como si acabara de llegar de un plano distante (o tal vez, como dijeron, no había podido ingresar).