Las drogas drenan tu energía

Nos quitan energía vital y nos cuesta mucho trabajo reponernos


Buscando un sentido en este mundo de desamor

CDMX, 29/7/2011. Este día Ramavajan meditó sobre la razón por la que tantas personas se hacen adictas a las drogas (los estupefacientes): muchos de ellos en realidad están buscando a Dios -explicó. Quieren tener crecimiento espiritual pero, al no encontrar respuestas en la realidad en que vivimos -la cual hemos dicho que fue diseñada a propósito para generarnos enormes frustraciones- recurren a las drogas, pero ésta es una salida falsa.


Ruta de escape

Metiéndose al inconsciente colectivo, nuestro líder descubrió por qué los jóvenes reinciden en este vicio: las drogas hacen que los individuos utilicen mucha energía de su cuerpo, principalmente energía de reserva –comentó. Los efectos de las drogas son espectaculares en sus mentes, se crean sensaciones que la persona no ha percibido antes, se viven momentos de gran liberación y se obtiene un placer difícil de repetir en condiciones normales, pero de algún modo las drogas únicamente son una forma de escape ante las duras emociones basura que atormentan nuestras vidas.


El elevado costo

Continuó: Para hacerte sentir bien, la droga toma tu propia energía y la consume generando calor y emociones exacerbadas, las cuales son temporales y muy impactantes. Más al terminar estos viajes de placer creados por el infinito poder creativo de nuestras mentes, a las personas les entran remordimientos muy fuertes, sentimientos de culpa y sensaciones similares a la resaca, con dolores de cabeza intensos y un cansancio derivado del enorme gasto de energía que la droga demandó, con el deseo de volver a consumirla para volver a experimentar placer.


La salida del laberinto

A fin de evitar caer en el círculo vicioso de los estupefacientes, Ramavajan recomendó utilizar las técnicas que hemos estado practicando en Gudai-Shambhala, entre las cuales están la meditación y mantener un elevado nivel de energía con una buena alimentación y una actitud positiva. A menudo pequeños cambios en nuestros hábitos pueden transformar nuestra existencia de manera sorprendente y mejorar la calidad de vida. También explicó que el laberinto que radica en el universo interior de cada uno de nosotros ofrece un camino de evolución diferente para cada quien, y que nadie excepto nosotros lo puede recorrer; pero la energía de Jesús el Cristo definitivamente ayuda a que los practicantes puedan ir alivianando su karma y transformando su destino.