Rompiendo los arcos de maldad

Seguimos haciendo meditaciones para cubrir todas las etapas de

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La promesa

CDMX, 17/2/2015. Este día me reuní con Ramavajan en la y nos pusimos a caminar para ir platicando. Él me había comentado que antes de venir a la misión, por lo que pregunté a los Maestros a través de su conexión: al igual que tú, ¿yo hice una promesa? Y me respondieron: no, porque . Entonces indagué: ¿cuál fue la razón por la que tú, nuestro líder, tenías que hacer una promesa? Pero nuestros Guías Espirituales no contestaron esto.


La fecha

Seguimos caminando y volví a inquirir: ¿la promesa era una protección en caso de que hubiéramos Y dijeron que sí. ¿Es momento de saber cuál fue esa promesa? Y dijeron: no; en abril 2015 será más conveniente.


El triángulo rojo

Volví a preguntar: ¿podemos hacer un trabajo para que Ramavajan tenga más dinero? Y dijeron: sí. ¿Qué tenemos que hacer? -inquirí. Concéntrense en un triángulo rojo; lo que vean o sientan, eso es lo que tienen que hacer.


Responden sobre la promesa

Entonces nos dieron un "adelanto" o una parte de lo que fue la promesa que le hizo Ramavajan a Dios: la fe, es la Fe de nuestro Señor… ¿a qué se estaban refiriendo? Posiblemente que, para cumplir cabalmente , tenemos que tener (nuevamente) una .


Para cumplir nuestro ofrecimiento

Entonces nuestro líder transmitió: al parecer, vamos a tener que ir a un lugar en donde haya pasto y sentarnos en flor de loto, porque allí vamos a hacer una concentración que nos va a permitir dar por cumplida esa promesa, o nos van a explicar con más claridad de qué se trató ese ofrecimiento. Esta concentración puede hacerse en cualquier jardín.


Visualizando los arcos

Entonces llegamos , nos sentamos cómodamente e hicimos una reflexión y pedimos: que llegue un buen negocio, que podamos arrancarlo con poco dinero y que nos dé muchas ganancias. Los Maestros dijeron: este mes de febrero tienen que estar haciendo concentraciones, tienen que quitarse bloqueos que les pusieron los oscuros. En realidad, esos bloqueos ya los habían puesto desde antes para toda la gente de luz. Ramavajan los visualizó en el etéreo: son unos arcos y hay que destruirlos; eso va a dar entrada a un sitio óptimo para efectuar la meditación sobre nuestra promesa. ¿Dónde están esos arcos? -pregunté. En cuarta y quinta dimensión -contestaron. ¿Requerimos aplicar algún tipo de energía para acabarlos? Pero los Maestros dijeron: por el momento, lo que Ustedes necesitan es irse a descansar.


Después de meditar

Al terminar de integrar las energías que se movieron, nuestro líder percibió: el día de hoy nos quitaron algo; a lo mejor fue un trabajo pequeño, pero había que quitar un sello o marca que traíamos y que era indispensable removerla para hacer después con éxito el trabajo de la promesa.


Dos días después

CDMX, 19/2/2015. Volvimos a vernos dos jornadas después y pedimos a nuestros Guías Espirituales que nos ayuden al cumplimiento de la promesa que Ramavajan le hizo a Dios. Ahora nos fuimos a trabajar al templo del y, al estar meditando con los ojos cerrados, Ramavajan vio los arcos en el etéreo y los destruyó. Refirió esto: después de romperlos, abrí unas puertas y cayeron muchas monedas de oro*; percibí colores grises, verdes y dorados. Explicó que la concentración de hoy es una preparación para todo lo que vamos a trabajar después, al momento de estar en el jardín. Cuando salimos del templo, nuestro líder sintió un clima agradable y con una frescura placentera. Tomamos esto como un indicador de que la meditación se hizo con excelencia.

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*Esas monedas de oro aún no las hemos visto a nivel físico; seguiremos integrando nuestros trabajos energéticos para verlas hechas realidad en el presente.